Euroinnova APP
¡Aprender online está a solo un click!
Consíguelo en el
App Store
DISPONIBLE EN
Google Play
Te ayudamos a elegir tu formación, pulsa aquí.
Cuando antes se detecte un TCA, antes se podrá intervenir e iniciar un tratamiento. Uno de los papeles fundamentales en la prevención y detección precoz de los trastornos de la conducta alimentaria es el entorno escolar donde se pueden identificar los primeros síntomas de estas enfermedades mentales. En este caso, el profesorado tiene varias oportunidades para darse cuenta de que el comportamiento es diferente y alarmante.
Los trastornos de la conducta alimentaria afectan a adolescentes y jóvenes, quienes son un colectivo con conductas de riesgo, ya que pueden llegar a interrumpir su desarrollo físico y mental. Por tanto, es muy importante la prevención y detección temprana de trastornos de la conducta alimentaria puesto que afectará mucho menos al deterioro de su vida social, académico, familiar y personal. Veamos cómo identificar y ayudar para tratar un TCA.
Antes de comenzar, hay que entender que los trastornos de conducta alimentaria (TCA) son enfermedades mentales graves relacionadas con la conducta alterada en los hábitos alimentarios traducidos en comportamientos como episodios de atracones a la falta de ingesta de alimentos.
Las personas con trastornos de la conducta alimentaria no eligen tener esta enfermedad mental. Son trastornos que afectan a la salud física y mental de quienes los padecen, y en algunos casos puede costar su vida. Por tanto, la prevención y detección temprana de trastornos de la conducta alimentaria son muy importantes. Debemos tratarlos con mucho cuidado y acudir al profesional de la salud que, gracias a la terapia, estas personas con trastornos pueden recuperarse por completo.
Hay que partir de que estos trastornos de conducta alimentaria puede afectar a cualquier persona de cualquier edad, género, peso corporal, origen racial y étnico. Aunque parezca extraño, las mismas personas que cuidan su salud, como por ejemplo deportistas, pueden desarrollar este problema de salud mental. Esto quiere decir que el trastorno de conducta alimentaria no se relaciona solo con el peso corporal.
Si vemos las estadísticas estudiadas sobre quiénes padecen estas enfermedades mentales, afectan mucho más a mujeres que a hombres. Los transtornos de conducta alimentaria más frecuentes que podemos encontrar son personas con anorexia nerviosa, personas con bulimia nerviosa, el trastorno por atracón y la restricción de la ingesta de alimentos.
El entorno donde se relacione y desarrollen las personas con TCA es muy importante porque quienes lo componen pueden observar y detectar los primeros síntomas, actitudes y conductas. Esto ayudará a la prevención y detección temprana de trastornos de la conducta alimentaria que experimenten los jóvenes en esos momentos críticos. Y para ello, existen síntomas detectables que pueden encender las alarmas sobre la aparición de una de estas enfermedades mentales que distorsionan la imagen corporal y conducen a situaciones de salud muy graves. Veamos qué señales podemos identificar para la prevención y detección temprana de trastornos de la conducta alimentaria:
Si la persona presenta alguna de estas señales, se pueden tener ciertas sospechas de la presencia de un TCA. Conocer toda esta información acerca de la prevención y detección temprana de trastornos de la conducta alimentaria supone ser consciente de que comportamientos o actitudes que podemos dejar pasar sean una alarma de la presencia de una mala conducta con la alimentación y hay que actuar rápido. El proceso completo que integra la prevención y detección temprana de trastornos de la conducta alimentaria y su derivación, en caso de TCA, comienza con la observación de las conductas, identificación de síntomas, acudir al médico de atención primaria (pediatria y médico de cabecera) y entrar en la unidad de Trastornos de la Conducta Alimentaria.
Para abordar un caso de trastorno de la conducta alimentaria, lo primero que hay que tratar es profundizar en los problemas de base, ya que los factores que pueden influir en el desarrollo de esta enfermedad pueden ser varios y diferentes. Dentro de los programas de prevención, actualmente, se está incidiendo más en la promoción de la salud emocional y fortaleza como llave para prevenir la enfermedad. Dependiendo del instante del proceso en el que se trate la intervención del trastorno de conducta alimentaria, existen diferentes tipos de prevención:
Cuando los pacientes de trastornos de la conducta alimentaria entran en la Unidad de Trastornos de la Conducta Alimentaria, se les proporciona un diagnóstico, un tratamiento especializado y unas pautas para las familias. El papel de los/as amigos/as es bastante importante para darle apoyo y fuerza a esa persona afectada por TCA pero, lamentablemente, no puede curarla.
Algunas pautas que seguir y que pueden servir de orientación para actuar como amigo/a ante un caso de TCA son animar a que pida ayuda profesional, insistir en la necesidad de recibir tratamiento o escuchar y mostrarte comprensivo con la situación. Es importante estar siempre al lado, de apoyo, durante el proceso, porque la persona verá en sus amistades una ayuda fundamental para su salud mental.
Para las familias es algo más complicado sobrellevar esta situación ya que conviven con esa persona que puede presentar síntomas tanto alarmantes como leves que pueden dar pie a comenzar la prevención y detección temprana de trastornos de la conducta alimentaria desde casa. La familia puede llegar a ser un factor causante de TCA, directa o indirectamente, y por ello debe comportarse y seguir las siguientes pautas para ayudar en lo que se pueda.
¡Muchas gracias!
Hemos recibido correctamente tus datos. En breve nos pondremos en contacto contigo.
Nuestro portfolio se compone de cursos online, cursos homologados, baremables en oposiciones y formación superior de postgrado y máster
Ver oferta formativa