Descubre cómo ser profesor de chino
¿Te gustaría trabajar como profesor de chino? El chino es un idioma que se aprende a cualquier edad. Hoy en día, en España, más de 40 000 alumnos estudian la lengua de Confucio. China es la segunda potencia económica mundial y el chino, el idioma más hablado del mundo. Teniendo esto en cuenta, podemos decir sin miedo a equivocarnos que la demanda de clases de chino no hará más que aumentar en los próximos años.
Si es así, debéis saber que antes de nada debéis dominarlo a la perfección y recibir cierta formación de aptitudes pedagógicas para saber trasmitir vuestros conocimientos. Pongámonos manos a la obra y descubramos juntos cómo convertirnos en profesores de mandarín.
¿Por que deberías estudiar chino?
- Aprender chino mandarín es un reto. Estadísticamente pocas personas hablan mandarín en Latinoamérica, así que aprenderlo definitivamente entra en la categoría de un reto interesante.
- Aprende mandarín por negocios. Aprender mandarín te da la oportunidad de ver más de cerca al mercado chino, considerado el segundo más importante a nivel mundial. Comerciar con China es visto como una de las mejores decisiones estratégicas en el mundo de los negocios, no solo para empresas, sino también para independientes. En este país podrás encontrar una gran cantidad de empresas que prestan sus servicios y venden sus productos a inversores extranjeros.
- Mejores oportunidades laborales. Aprender chino mandarín te abrirá las puertas a nuevas oportunidades laborales. Debido al crecimiento que ha tenido el gigante asiático, muchas empresas Americanas necesitan personas que se encarguen de las relaciones con empresas chinas. Poder colocar en tu currículum que hablas mandarín, te da la oportunidad de optar por posiciones clave en empresas multinacionales que sostienen relaciones con China, incluso con instituciones gubernamentales. De más está decir el beneficio económico que representa esa oportunidad.
- Mejora tus capacidades intelectuales. Estudios han demostrado que aprender un nuevo idioma desarrolla ciertas capacidades intelectuales en las personas. Incluso, algunos han demostrado que las personas bilingües pueden retrasar los síntomas de algunas enfermedades como el alzheimer o la demencia senil.
¿Cuál es la formación ideal para ser profesor de chino?
Todos aquellos estudiantes que quieren convertirse en profesores de idiomas tienen un camino marcado bastante claro, que comienza en el instituto y culmina con el máster Europeo de Acreditación Docente para Profesores de Chino
Las etapas claves de tu recorrido académico para ser profesor de chino es la siguiente:
- Bachillerato de letras.
- Grado en Estudios de Asia y África: Árabe, Chino y Japonés o similar.
- Máster de Formación de Profesorado.
Hagamos algunas puntualizaciones sobre este pequeño recorrido:
- Para el Bachillerato: aunque no sea obligatorio (dado que los grados de letras suelen estar a disposición de perfiles muy diversos), recomendamos seguir un bachillerato de letras para conocer mejor la literatura universal y tener unos conocimientos lingüísticos en general más amplios.
- Las universidades españolas ofrecen distintos grados y estudios de cultura y lengua china. Tenéis que informaros bien sobre las materias que ofrecen para seleccionar así el que más os interese.
- El Máster de Formación de Profesorado es un curso de chino que sustituye al antiguo CAP (Certificado de Aptitud Pedagógica) y es completamente imprescindible para todos aquellos que quieran presentarse a unas oposiciones para incorporarse al funcionariado docente. De momento, no son muchos los centros universitarios que ofrecen la especialidad de Chino en este Máster, así que tendréis que informaros bien.
¿Podemos ser profesores de chino sin una titulación que nos acredite?
¿Te has dado cuenta de tu vocación un poco tarde y no habéis seguido esa formación que mencionamos en el apartado anterior?
No te preocupes, no hay nada que te impida convertirte en profesor de chino. Puedes recurrir a otras opciones, caminos diferentes que te llevarán a ese mismo objetivo: enseñar la lengua de Confucio.
¡También puedes dar clases particulares! Eso sí, será imprescindible que tengas un buen dominio del idioma y tener ciertas competencias comunicativas esenciales para trasmitir de manera efectiva tus conocimientos a los alumnos.
Es una solución con pocos (o incluso sin) límites, ya que no se exige ningún diploma o certificado.
Debes de demostrar que eres un profesional, con capacidad organizativa y una buena metodología de enseñanza que os permita realizar un seguimiento personalizado de cada uno de vuestros alumnos.
Piensa que en este caso huimos de las clases abarrotadas para hablar de clases individuales: ideales para los que empiezan en el mundo de la docencia.
¿Y si pruebas nuestro máster de chino?
Máster para ser profesor de chino
Los profesores de formación secundaria en chino tienen que está constantemente actualizados. Con este Master los alumnos estarán capacitados para formar en Chino.
El profesorado además conocerá las pruebas de evaluación de las competencias educativas del alumnado, podrá aplicar de manera didáctica las TIC en las aulas y aplicar la tutoría como una de las actividades docentes de los profesores, y por último podrá conocer la importancia del coaching educativo.
¿Queréis dar clases de chino como profesores particulares?
Enseguida os daréis cuenta de que los profesores particulares responden a perfiles a de lo más variados. Entre los muchísimos docentes especializados, encontramos:
- Expertos de chino: nativos o hijos de nativos. El mandarín es su lengua materna y conocen a la perfección la cultura china. Dan unas clases muy enriquecedoras desde el punto de vista lingüístico y también desde el cultural, ya que enseñan China a sus alumnos desde una perspectiva diferente.
- Docentes diplomados: profesores de chino que han seguido el recorrido de formación más tradicional y que no solo tienen unos conocimientos muy avanzados del idioma, sino que también poseen ciertas competencias pedagógicas que les permiten adaptar su metodología a sus alumnos. Sabrán acompañarles y hacerles progresar ayudándoles a pronunciar (diferenciando bien las cuatro tonalidades), enseñándole como escribir los caracteres chinos (caligrafía), crear frases completas, formar una base sólida de vocabulario, etc.
- Estudiantes de chino: hay muchos estudiantes universitarios que se ofrecen como profesores particulares para sacarse un dinerillo extra o pagarse los estudios. Se trata de jóvenes con un buen nivel para dar clase a niños y adolescentes que están empezando a aprender el idioma de Confucio. Además, si estos estudiantes pretenden dedicarse después a la enseñanza, las clases les ayudarán a consolidar sus competencias pedagógicas.
- Los apasionados: no son profesores, estudiantes ni chinos, pero sí que dominan el idioma a la perfección y sienten pasión por el gigante asiático. Han viajado mucho por (e incluso vivido en) China. ¿La ventaja? Que se han enfrentado de primera mano a la vida en China y pueden compartir esas experiencias con sus alumnos.