Índice
La Inteligencia Artificial ya está en casa y a la vista. Tu móvil, el altavoz o la televisión la integran para responder a tus comandos directos. Es una tecnología activa y evidente. Sirve para organizar la agenda familiar, coordinar luces y calefacción, gestionar la lista de la compra o proponer recetas con lo que queda en el frigorífico. El sistema debe entender el lenguaje natural y convertirlo en acciones concretas.

Cuando hablamos de IA en el hogar nos referimos a asistentes, como Gemini para Google Home, capaces de entender peticiones en lenguaje natural, cruzar datos (horarios, hábitos, ubicación) y automatizar tareas domésticas sin que tengas que abrir diez aplicaciones distintas.
Para visualizarlo, piensa en una mañana cualquiera. Dices “buenos días” y, de repente, se encienden luces suaves, escuchas la previsión meteorológica, recibes el estado del tráfico en tu trayecto y un recordatorio de las citas del día. A mediodía haces una foto al frigorífico y pides una cena rápida con lo que hay. Por la tarde, el asistente te avisa de que va a llover y te recuerda que cojas el paraguas antes de salir. Por la noche, con una sola frase, bajas las persianas, activas el modo eco y silencias las notificaciones. Así se vive la vida cotidiana con IA: todo encaja mejor y ganas más tiempo para ti.
Ya conocemos muchos usos de la inteligencia artificial pero, para que lo veas más claro, aquí van algunas situaciones muy comunes en las que la IA aporta valor en el hogar.
Lo mejor es que no necesitas instalar mil aplicaciones diferentes: los asistentes inteligentes con IA integran y ejecutan estas funciones en segundo plano.
La clave es la simplicidad: estos asistentes entienden peticiones complejas en lenguaje natural y automatizan la gestión de tus dispositivos y aplicaciones. Hablas normal; ellos convierten tu petición en acciones.
Estos son algunos de los comandos habituales y eficaces:
La pauta es sencilla: habla de forma natural y pide tareas completas. Por ejemplo: “apunta comprar tomate y pan integral y recuérdamelo hoy a las 19:00”.
Cuando ya tengas lo básico, prueba estas acciones que funcionan bien en casi cualquier casa. Son simples y marcan diferencia desde el primer día.
“Si mañana llueve, despiértame 10 minutos antes y recuérdame coger el paraguas.”
“Cuando no haya nadie en casa, apaga la calefacción.”
“Reparte tareas de limpieza por estancias y recuérdalas el viernes a las 18:00.”
"Crea una lista de la compra y compártela automáticamente con todos los miembros de la familia.”
“Propón tres cenas con lo que caduca esta semana.”
“Temporizadores encadenados para entrenar: calentamiento, series y estiramientos.”
“Lee en voz alta la noticia sobre el lanzamiento del disco de Rosalía mientras cocino.”
“Si hay movimiento en el garaje por la noche, enciende la luz y envía un aviso.”
“Revisa mi calendario semanal y dime qué día tengo un hueco para ir al banco en horario de mañana.”
Usar tecnología con tranquilidad es cuestión de hábitos. Antes de lanzarte a todo, piensa en lo esencial y ve paso a paso.
Sin entrar en tecnicismos, hay combinaciones que elevan la experiencia. Esta es una de ellas y se nota en el día a día.
Todo esto ayuda a reducir tareas repetitivas y pequeños inconvenientes, y te da la sensación de tener una casa que colabora contigo.
Si quieres exprimir estas ideas tanto en casa como en tu perfil profesional, en Euroinnova ofrecemos el curso gratuito “Domina la IA con Gemini” de Google. Con esta formación gratuita aprenderás a conversar con asistentes, diseñar rutinas útiles y automatizar procesos paso a paso. Una manera sencilla de pasar de “me suena” a “lo utilizo a diario” y convertirlo en una habilidad digital que, además, suma en tu empleabilidad.
¡Muchas gracias!
Hemos recibido correctamente tus datos. En breve nos pondremos en contacto contigo.