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Un instrumento notarial es un instrumento autorizado y validado por un notario público, un especialista en derecho, cuya labor permite que estos instrumentos cobren un carácter oficial en cualquier tipo de acto jurídico en el que sean solicitados. Entender qué es un instrumento notarial facilitará su utilización e implementación dentro del ejercicio notarial, por ejemplo, en su uso dentro de la voluntad de realizar una donación entre dos particulares.
Las nociones básicas para entender qué es un instrumento notarial suponen que estos instrumentos públicos son un aval, una especie de fe pública, que produce el ejercicio notarial, con respecto a ciertos hechos o actos jurídicos presenciados durante la función de notario. Este tipo de escritura pública, en otras palabras, da fe acerca de voluntades, de pensamientos o la descripción de bienes y hechos a través de la escritura.
Conoce todo lo necesario acerca de qué es un instrumento notarial y usa este protocolo de escritura para dejar fe de lo que necesitas.
Entendemos lo que es un instrumento notarial como aquel material que sirve para plasmar, mediante escritos representativos, el pensamiento del hombre y su voluntad. Ahora veamos la clasificación que existe de estos a continuación:
Son aquellos expedidos por un funcionario público o un notario, y que dan fe de los hechos realizados en su presencia.
Son aquellos que dejan constancia de un hecho sin haber sido expedido por un funcionario público, es decir, son expedidos por particulares. Aunque para que sea legal debe ser notariado por un notario público.
Son las escrituras y demás actas que el notario incorpora al protocolo notarial y de las que se deben conservar copias que la ley determina, para entender qué es un instrumento notarial debes entender que, dependiendo de si se incorporan o no al protocolo notarial, estos serán protocolares o extraprotocolares.
Son instrumentos que no cuentan con una matriz oficial dentro del archivo notarial. Puede ser cualquier tipo de evento presenciado por el notario, acreditado como un evento oficial por el mismo.
Es una colección ordenada de registro sobre una misma materia. Estos instrumentos públicos son: escrituras, testamentos, actas de protesta o de transferencia de bienes y otros que la ley determine.
Aquí se extienden las protocolizaciones (documentos, resolución judicial o administrativa que la ley ordene), actas (registro de los hechos o actos que el notario presencie en competencia a sus funciones) y las escrituras públicas (todo documentos matriz que autorizado por el notario es incorporado al protocolo notarial).
Se lleva en forma directa con el notario el testamento de escritura pública y el cerrado, para garantizar lo que la ley establece.
Se extiende a las actas de protesto de los títulos de valores. Se pueden llevar registros por separados si los valores de los títulos son instintivos para su uso de forma impresa.
Se extiende a las actas de bienes muebles registrables, como los vehículos usados.
La importancia de la escritura pública, radica en la necesidad de agilizar y facilitar algunos procesos burocráticos, como son la declaración de eventos, comprobación de estados financieros o fe pública acerca de diversos procesos en los que los ciudadanos puedan necesitar. Ante esa premisa es importante el ejercicio o función notarial que se encarga de la legalización de la voluntad de los civiles.
Para comprender en qué se diferencian los distintos documentos legales que avala un notario, es esencial conocer la diferencia entre documento e instrumento notarial. Aunque tienen aspectos en común, el documento y el instrumento notariales no son lo mismo.
Por un lado, el documento notarial es un término más general que engloba todos los escritos elaborados o intervenidos por un notario en cualquier momento, independientemente de si son de carácter público o privado. Por otro lado, el instrumento notarial es un documento público que ha sido redactado e intervenido por un notario y que posee valor probatorio pleno.
En resumen, un documento notarial es todo aquello con lo que trabaja un notario, por lo que todos los instrumentos notariales serán documentos, pero no al revés.
En el apartado anterior, te hemos explicado que un documento notarial es todo aquel documento que ha autorizado un notario y que, por lo tanto, cuenta con su validez y legalidad. Entre las principales características de un documento notarial, encontramos su autorización notarial, la fe pública, la validez legal o la ejecutoriedad.
Pero quizá te preguntes... ¿Qué tipos de documentos notariales existen? A continuación, te mostramos algunos ejemplos de documentos notariales que debes conocer, según el Consejo General del Notariado:
Como hemos adelantado, uno de los instrumentos más utilizados por los notarios son, sin duda, las escrituras notariales. Una escritura notarial es un documento público que es redactado ante un notario y, por lo tanto, adquiere seguridad jurídica, autenticidad y oficialidad. Además, tiene carácter probatorio. El notario, mediante el ejercicio de sus funciones, otorga legitimidad y oficialidad a todo lo detallado en una escritura notarial, bien sea una compraventa, un testamento o cualquier otro acuerdo legal.
Dentro de las escrituras notariales, encontramos:
Escrituras de compraventa
Escrituras de hipoteca
Escrituras de poder
Escrituras de donación
Escrituras de constitución de sociedades
Escrituras de testamento
En todos estos tipos de escrituras notariales, se cuenta con el sello notarial, es decir, el notario avala su oficialidad y validez jurídica para el contenido de todas ellas. Por ejemplo, en una escritura de donación, el notario asegura que se ha formalizado la entrega voluntaria de bienes a otra persona sin ningún tipo de compensación económica a cambio.
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