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¿Te has preguntado como padre, de qué forma trabajan la sexualidad en educación inicial y cuándo comienzan a hacerlo? O, has pensado, como profesor responsable de un aula de clases, ¿Qué tan preciso y consciente eres del tipo de actividades para trabajar la sexualidad en primaria y cómo puedes abordar el tema de manera apropiada?
Tal vez, si le preguntamos a un gran número de maestros si trabajan o no la sexualidad entre sus estudiantes, quizás la mayoría de las veces respondan que no o quizás titubeen por no estar seguros, pero la realidad es que este tipo de educación se lleva a cabo de manera habitual, aunque no seamos conscientes de ello. Seguramente, al hablar de sexo dentro del ámbito académico de primaria, muchos pensarán en una unidad didáctica de Ciencias Naturales, pero en esta oportunidad, queremos invitarte a pensar en el tema de una manera más integral en la que, con una serie de actividades interactivas diversas y desde una dimensión mucho más amplia, nuestros niños puedan aprender mucho más que mencionar genitales, aparatos reproductores o los tipos de relaciones.
El camino hacia una sexualidad sana no se empieza a recorrer en la adolescencia como pensarán algunos, sino mucho antes, desde nuestra primera infancia; creer que el objetivo fundamental de aprender sobre el tema es evitar un embarazo o sólo considerar la prevención ante el contagio de enfermedades es una reducción que nos priva de comprender más ampliamente de qué va esta faceta del ser humano.
Temas como la identidad de género, la orientación sexual, la afectividad y las precauciones que se deben tomar antes y durante el acto sexual, están insertándose de manera progresiva en las prácticas docentes actuales, por lo que no está de más conocer distintas actividades para trabajar la sexualidad en primaria.
Hoy en día, muchos docentes proponen unidades didácticas en las que se hable de sexo como una forma de aprender a conocernos, a respetarnos, a entender nuestros cuerpos y nuestras emociones para así poder comprender a los demás. De este modo, es importante señalar que las actividades para trabajar la sexualidad en primaria que se proponen, tratan dicho tema como un valor que atraviesa todas nuestras relaciones.
El proyecto educativo que emprendas en relación a la educación sexual de tus estudiantes deberá seguir una secuencia didáctica acorde a las etapas en las que se vayan desplazando. A continuación, además de las estrategias usuales que puedes aplicar, te dejamos algunas pistas valiosas con las que seguro podrás empezar a diseñar otras específicas en relación al tema:
Esta es esencial dentro de las primeras actividades para trabajar la sexualidad en primaria, ya que nos ayuda a conocer el concepto que tiene cada alumno y alumna de su propio cuerpo.
Un buen ejercicio sería el poder dibujar sus cuerpos sin ropa para luego ir dando nombre a cada una de las partes, incluyendo los genitales; se trata de una forma de ir identificando con naturalidad y respeto.
Esta actividad es ideal para realizarla en el momento en el que decidimos enseñar acerca de la reproducción. Debemos mostrar a los alumnos los aparatos reproductores tanto femeninos como masculinos, explicando las funciones y, nuevamente, poniendo nombre a cada una de las partes; de igual forma que hemos hecho con los aparatos reproductores, pondremos también nombre a los genitales masculinos y femeninos.
Igualmente, este trabajo ayuda a encarar la intimidad sobre los genitales, teniendo en cuenta que son ellos y ellas los únicos que deben tocarlos y que no se pueden tocar sin su permiso, lo que la convierte en una de las actividades para trabajar la sexualidad en primaria que nos ayudará a evitar el abuso o a identificarlo en caso de que pudiera haberlo.
Con la misma, se les invita a analizar diferentes anuncios o fragmentos de películas o series donde aparezcan distintas relaciones (parejas, amigos, etc.).
Lo que se pretende con este tipo de actividades para trabajar la sexualidad en primaria es crear un pensamiento crítico hacia lo que ven a través de la televisión e internet para así poder romper mitos y dejar a un lado la imitación sobre lo que tiene que ser una mujer (delicada, sin fuerza, etc..) y lo que tiene que ser un hombre (rudo, fuerte…).
De esta forma, podremos ver que hay diversas maneras de ser hombre y de ser mujer más allá de los mitos y que debemos respetarnos unos a otros.
En definitiva, es importante recordar no poner la mirada de adulto en las acciones que los niños desarrollan de manera espontánea, atendiendo a que la clave de todo es escucharles y observarles para saber cuáles son sus necesidades.
Estas actividades para trabajar la sexualidad en primaria constituyen un conjunto básico, que puede servir como entrada para profundizar de manera progresiva y acorde a las edades que tengan nuestros niños. Por supuesto, mientras avanza el tiempo se tiene que tener mucha más delicadeza para atenderlos de la mejor manera y para ello, lo ideal es convertirse en un profesional.
Por ende, si te interesa convertirte en un experto en las actividades para trabajar la sexualidad en primaria o quieres saber cómo abordar este tipo de temas, te invitamos a ingresar en Euroinnova, la Escuela de Negocios en formación online, donde encontrarás los mejores programas educativos para ser un experto del área.
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